Vestite de azul: junto al autismo

El 2 de abril se conmemoró el Día Mundial del Autismo y, por ese motivo, queremos contarte un poco sobre esta afección.

 

El Trastorno del Espectro Autista, o TEA por sus siglas, es un conjunto de afecciones caracterizadas por algún grado de dificultad en la interacción social y la comunicación. Se relacionan con algunos patrones atípicos del comportamiento, como la hiperreactividad a las sensaciones, la concentración excesiva y la gran atención a los detalles.

Las causas de esta afección están aún en estudio, aunque la evidencia indica que que los factores genéticos y ambientales influyen en su desarrollo. También, se sabe que el autismo es una condición variable de paciente a paciente, con lo cual se lo estudia dentro de un espectro de síntomas y comportamientos. Esto significa que no todas las personas con autismo son iguales ni presentan las mismas características.

¿Cómo se detecta?

En muchos casos es posible ver signos de TEA desde la primera infancia. Entre los primeros indicios en el niño, algunos afectan a la comunicación y la relación con otras personas, tales como:

  • Hace escaso contacto visual.
  • No responde cuando lo llaman por su nombre.
  • Prefiere jugar solo.
  • Tiene un retraso en el habla.
  • No expresa emociones o sentimientos.
  • No parece entender preguntas o instrucciones sencillas.

Además, hay algunas señales en su comportamiento que pueden alertar:

  • Realiza movimientos repetitivos.
  • Lleva a cabo rituales repetitivos y se altera si se interrumpen o cambian.
  • Es hipersensible a la luz, el sonido o el tacto. Por el contrario, parece ser indiferente al dolor o las temperaturas.
  • No se involucra en juegos de imitación o fantasía.
  • Es selectivo en su alimentación y rechaza alimentos por su textura.
  • Se fija con exagerada intensidad en un objeto o actividad.

 

Hay muchas señales que pueden indicar que un niño presenta un trastorno del espectro autista. Lo importante para detectarlo es llevarlo a la consulta pediátrica regularmente y seguir las indicaciones del médico.

Para los padres, incluso la sospecha de un diagnóstico de este tipo es angustiante. Pero es fundamental saber que hay muchas acciones que se pueden llevar a cabo para ayudar a un niño con autismo a crecer e integrarse con el entorno.

Para esto, es conveniente realizar un diagnóstico temprano que permita encarar los tratamientos necesarios a tiempo y ayude a darle herramientas al niño para su desarrollo.

 

¿Querés un turno con nuestro servicio de Pediatría? Comunicate con nosotros a través del Contacto o por WhatsApp al 11 2022-2517